Hace mucho tiempo, la isla de Mozambia, se había convertido de un paraíso de paz entre los animales voladores de la misma .Después de interminables peleas por ocupar la mejor zona de playa, habían decidido determinar su propio territorio bajo sorteo, de tal forma que la tierra asignada para una raza, no podría ser ocupada, salvo permiso, por otra raza y así mantuvieron ese pacto Pues fue precisamente en el territorio ocupado por las Águilas Pescadoras, donde nació esta historia; “ Parece ser que una de las familias que formaban este territorio era por parte del macho, el Águila conocida por Ala Blanca y su mujer la llamaban por su dulzura Pico de Miel, pero jamás fueron plenamente felices, porque el destino les había anulado tener polluelos, como las demás familias y esto les entristecía el alma cuando al regreso de sus viajes de pesca, desde su nido, veían como las demás Águilas alimentaban a sus polluelos, mientras que el suyo, siempre estaba vacío. Esta soledad la intentaban olvidar queriéndose más, pero olvidar, nunca lo habían olvidado, sin embargo, seguían soñando con el día que tuvieses su primer huevo.
Pero un día, Pico de Miel, notó algo extraño dentro de su cuerpo… algo que parecía que iba creciendo; tal vez solo fueran ilusiones y no quiso decirle nada a su amado Ala blanca, además se acercaban los días en que los machos, saldrían dos semanas de pesca, y si era lo que ella creía que era, le daría la noticia a su regreso .Además le preocupaba que esa noticia lo mantuviese nervioso durante la pesca y le sucediera algo pero .Ala Blanca, también había notado algo extraño en Pico de Loro y pensó que sería la cercanía de la marcha y nada le preguntó .Y llegó el día de la despedida… y sin decir palabra, se vieron con una mirada llena de dulzura pero a la vez triste .Los días fueron pasando y la barriga de Pico de Miel iba creciendo .Ahora no tenía dudas que pronto pondría su primer huevo y pensar la felicidad que tendría Ala Blanca, la hacía más feliz. Y así, con el paso de los días, dio entrada al regreso de las Águilas cargadas de peces en sus barrigas, para alimentar sus familias. Sin apenas dormir de los nervios, Pico de Miel, permaneció desde muy temprano contemplando el regreso de su marido, imaginando el momento de decirle que por fin iban ha ser padres. Y llegaron los primeros rayos del Sol y allá, a lo lejos, una gran bandada de Águilas Pescadoras, se divisaron en el firmamento .Contentas, fueron entrando en el poblado, dirigiéndose cada una a su nido, pero los nervios de Pico de Miel, la estaban entristeciendo .Nunca su marido había sido de los últimos, más bien era el primero, por eso, todo el pueblo lo primero que veía era una ala blanca y de ahí, le pusieron Ala Blanca .Un oscuro presagio estremeció su cuerpo, cuando entró la última Águila ¿Qué le había pasado..? ¿Cómo tardaba tanto…?
-No lo esperes más, Pico de Miel- le contestó un vecino
-¿Qué no le espere más…? ¿Qué quieres decir….?
-Lo siento… ya nos íbamos ha reunir, para regresar y…..
-¿ y…..que….. pasó……?
-Un barco ballenero…lanzó un cañonazo y… su arpón …. dió de lleno en el cuerpo de Ala Blanca, destrozándole…Cayó al mar y allí se hundió…..lo siento
-¿ Que un arpón…. Que mi Ala Blanca …. se murió…?
Aquella noticia le desgarró el alma. Ya no podría vivir sin él ni quería hacerlo.¿Porque el destino había sido tan cruel…. ahora que ella lo había esperado con tanta ilusión para darle la noticia de su nuevo hijo. Y ahora que iba ha ser de él .Sin padre y ella sin ganas de vivir, estaba condenado a la muerte .Nadie en el poblado lo querría adoptar…¿Qué hacer…? El tiempo era corto para su nacimiento y no podía permitir que su pequeño muriese, así que decidió penetrar en los territorios de las Gaviotas e intentar dejar su huevo en un nido donde ya hubiese tres o cuatro, con la esperanza que no se dieran cuenta si había puesto tres o cuatro, y así, igual el destino, le permanecía vivir, otra cosa sus pocas fuerzas y dolor no le permitían pensar y ante la llegada inminente de su puesta del huevo, observó desde un árbol cual sería el mejor nido para su pobre hijo. Y sí, allí había un gran nido con tres huevos; así que se apresuró, aprovechando que sus dueños estaban en las horas de pesca y dejó a su pequeño en el medio de los demás para intentar pasar desapercibido. El tiempo se le estaba acabando a Pico de Miel y al intentar el regreso, su agotado y dolorido corazón, se rompió, cayendo al mar, muerta pero con su último pensamiento de que allí, en el fondo del mar, encontraría a Ala Blanca y le contaría el reto de la historia que el destino le privó .Al regresó de su tiempo de pesca, las Gaviotas se dirigieron, cada una a su nido y en este caso, el macho fue el primero en llegar
-¿Cuántos huevos me dijiste que habías puesto…?
-¡¡¡ Yo que sé… ahora estoy cansada para esas preguntas tontas…!!!!- le respondió
-¿No me habías dicho que 3 ….?
-¡¡¡Déjame descansar… porque me lo preguntas…?
-Porque en el nido hay 4 huevos….
preocupantes noticias iban llegando a la comunidad procedentes precisamente del mundo de las Águilas Pescadores; comentaban que un Águila denominad “Águila Negra”, era la causante de la destrucción de varios pueblos; el de los conejos, el de las perdices… Su poder destructivo era imparable, y cada día aumentaba su ejercito de seguidoras .Estaba claro que pronto recibirían la visita de Águila Negra y un tremendo dolor angustioso se apoderó de todo el poblado. Y fue precisamente, en una de esas asambleas del Pueblo, cuando habló pro primera vez, el Águila Gaviotera, como así la llamaban:
-Hoy quiero hablaros y debéis escucharme…
-¿Quién le ha dado permiso para hablar….?
-El permiso me lo tomo yo en gratitud a vosotros que ahora sois mi pueblo Sé que no soy una Gaviota como vosotros y no sé como he llegado hasta aquí, pero primero mi familia me ha aceptado, y poco a poco vosotros también. Sé que soy una Águila Pescadora y sé como defender mi pueblo que es el vuestro…
-¿ Ah… sii…. como….?
-Debéis obedecerme…?
-¿Obedecerte….? ¡¡¡¡ lo que faltaba….!!!
-¡¡¡¡Callaros… y dejarla hablar…!!!!
-Tenéis que confiar en mí o de lo contrario, Águila Negra destruirá el Pueblo .Montaremos puestos de vigilancia las 24 horas del día y su misión es ver cuando se acerca Águila Negra y después ya os diré lo que debéis hacer, pero es importante que confiéis en mí.
Y así lo hicieron. Vigilaron todos los puntos por donde podría entrar Águila Negra, pero no sabían lo que harían después, y fue a la cuarta noche, cuando la voz de alarma sonó, ante la inminente llegada de Águila Negra y su ejercito .Estaba claro que se dirigían al poblado de las Gaviotas…
-¡¡¡¡ Alarma….alarma… se acerca Águila Negra…!!!!
-¡¡¡ Atendedme…-grito Águila Pescadora- debéis permanecer en vuestros nidos como si estuvierais durmiendo, pero todo lo encogidos que podáis..
-¡¡¡Que estupidez… porque así nos destruirá con más facilidad.. como unos cobardes… debemos atacar..
-Nooo…hacedme caso… deberías aparentar que estáis dormidos….confiar en mí
No había tiempo para discusiones y la Vieja Gaviota, confió en él ordenando a las demás que obedecieran y así lo hicieron .Mientras se acurrucaron en sus nidos, el Águila Gaviotera, levantó su vuelo al encuentro de Águila Negra…
-¡¡Hola Águila Negra…!!! ¿hacia donde te diriges….?
-¡¡ Voy camino del pueblo de las Gaviotas para destruirlo..!!!
-¿ Y está muy lejos…?
-Que va… ¿acaso no lo ves…?
-¿En donde…?
-¡¡¡ Águila Pescadora… está ciega o me estas tomando el pelo?... ¡¡¡ ahí lo tienes…!!!
-¿ese…? ¿llamas a mi pueblo de Águilas… el pueblo de las Gaviotas…?
-¿tu pueblo…?
-¡¡¡Pues claro… yo vivo ahí…. Y si quieres puedo despertarlos… aunque no creo que les haga mucha gracia que tú la más inteligente de las Águilas, las confundas con Gaviotas…!!!
-¿Pero ahí viven Águilas…?
-Pues claro… o no me ves. Hace tiempo que nos trasladamos aquí… pero si quieres las despierto…
-¡¡¡¡no…no…no…”!!!, lo siento…. Me habré confundido…Te pido disculpas y guarda este secreto entre los dos…
-Lo haré y pronuncias el juramento sagrado de las Águilas… de que nunca vendrás por aquí…
-¡¡¡Lo juro…!!!, jamás pasaremos por aquí… pero tú no le digas que creí que era un pueblo de Gaviotas
-No te preocupes, Águila Negra… nunca lo sabrán.. salvo que vuelvas algún día
-¡¡¡Te lo he jurado…!!! Y nunca volveremos
Y así sucedió… que gracias a la Águila Gaviotera, el poblado de las Gaviotas… jamás fue visitado por Águila Negra y vivieron felices, aceptando con más carió al Águila Pescadora entre el poblado de las Gaviotas, nombrándola Comandante en Jefe de todas las gaviotas.
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