EL PEZ VOLADOR, EL MARTÍN PESCADOR Y EL MAREMOTO QUE MATABA SARDINAS.

         EL PEZ VOLADOR, EL MARTÍN PESCADOR Y
         EL MAREMOTO QUE MATABA SARDINAS.

-¡¡¡Hola Pez Volador... me tenías muy preocupado
porque la Luna ya ha salido y el Sol dormido estaría
y llevas tres días  en el fondo del  Mar sin estar conmigo...
y yo preocupado por lo que te pasaría...!!!

-Mis padres, de salir del Mar ... me lo han prohibido ...!!!
-¿Es que acaso  no saben  que vienes ha charlar conmigo?
-Claro que sí... pero me piden que tenga mucho cuidado
con la cantidad de Maremotos que noche a noche han aparecido.

-¿Maremotos...? ¿ que tonterías me hablas hoy o estás ido...?
-No son estupideces pues han matado a la mitad de las sardinas,
lo contaron ellas cuando retornaron las que quedaron vivas
escapadas, maltrechas y llenas de terror al ver morir sus familias.

Tal vez el Maremoto con sus explosiones, a las Sardinas
les reventaron las tripas  para despues recogerlas con una red
muertas, medio muertas y hasta que del ruido... quedaron aturdidas
o eso al menos le escuché a mi padre que nada de todo... entendía.

-¡¡¡ Yo tampoco entiendo nada de lo que hablas pues como todas
las mañanas bajé a comer y el Mar... como un plato no se movía...
y un Maremoto produce grandes olas pero no explosiones que
solo maten, de peces a las buenas Sardinas... no entiendo esa película!!!

Además si así fuera, en la tierra hasta los árboles, el Maremoto notarían
y esos humanos que se llaman Sabios  a las poblaciones avisarían y
buscarían tras los Mares esos que llamas Maremotos de noche y de día
¿estas seguro que eso fué lo que le escuchaste a tus padres o lo soñaste de día?

-¡¡¡ Es verdad...!!! y he visto llorar a mi madre al pensar con dolor
cuantas Sardinas se llevarían sin entender porque el Maremoto no
explota en otros mares... solo donde ellas... se crían...
y solo buscan los hogares de las inocentes y frescas Sardinas...

-Eres mi amigo y creo sin entender lo que tu padre decía,
algo habrá que hacer por las que aún están vivas,
debo volver tierra a dentro y preguntar como los Maremotos
tienen explosivas dentro del Mar... sucesivas...

-De acuerdo... yo regresaré al fondo del Mar y quedamos
de vernos dentro de 3 lunas, en la Roca Negra como todos los días
-¡¡¡ Hasta pronto Volador y te prometo que no pararé hasta que me lo digan!!!
-¡¡¡ hasta pronto buen amigo Martín y aquí esperaré tus noticias...!!!

Y hasta cada uno de sus destinos volaron para descubrir
la triste desgracia de las Sardinas y el Maremoto que las rompía,
El Martín Pescador pensaba... ¿quien me lo explicaría...?
tal vez el Alcatraz, desde su alto vuelo, el Maremoto miraría...

Pero el misterio, sin comprender por extraño, a todos parecía
-Pudieran ser las bombas  de aquellos barcos que vimos el otro día...?
-¿De que bombas me hablas Alcatraz si ellas están prohibidas...?
-Pero no para los hombres malos y llenos sus corazones de codicias.

-Gracias Alcatraces... le llevaré al Pez Volador vuestras noticias
aunque no sé si podré llegar hasta el fondo del Mar donde vive su familia
pero ¿Como sabrán las sardinas cuales son los barcos que matan sus vidas?
porque barcos hay muchos y no todos llevan bombas explosivas.

-Tienen las chimeneas de color rojo y por las noches todo su casco brilla,
nosotros no pescaremos  mientras los demás peces no encuentren una salida
que permita hundir a esos malvados barcos que por las noches recogen sardinas
sin pescar con las redes... pero llenando el Mar de bombas que aniquilan.

-Gracias Alcatraces... le llevaré vuestras afortunadas noticias
aunque no sé si podré volar hasta el fondo del Mar donde mi amigo
vive con su familia y me quedaré a medio camino
sin poder respirar más aire y en ello... pierda mi vida...

-No te preocupes Martín Pescador que conozco el lugar donde habitan
y por eso ellos le llamaban Maremotos  cuando solo son explosiones
que revientan a las pobres Sardinas y a eso los humanos le llaman
pescadores furtivos y están castigados ante la Ley, con su propia vida.

¡¡¡Monta sobre mis alas y cierra los ojos cuando sobre el Mar fije mi vista
que cruzarlo lo cruzaremos y luego te subiré para arriba...!!!
-Gracias de  nuevo amigos porque al ayudarme a mi... ayudáis a las Sardinas
que todos estamos para vivir con las reglas de juego de nuestra vida.

Cuando informó al Pez Volador  y este a su padre...¡¡¡ no se lo creía!!!,
aquella tarde el Consejo de Peces debía tomar una decisión dura
para evitar que por las noches volvieran a aniquilar a las buenas Sardinas
para convertir una pesca en un asesinato con bombas asesinas.

El Consejo de Peces acordó avisar a todas las especies marinas
desde los grandes Tiburones hasta las Ballenas Asesinas y tambien
a los Delfines que con sus saltos al ver los barcos de chimeneas rojas
les avisarían, pero si era de noche ¿como lo harían...?

Pensaron en una solución pero por más vueltas a nadie se le ocurría
hasta que el pequeño Pez Volador, la solución creyó que tenía...
-¡¡¡ Oídme... hablaré con mi amigo el Martín Pescador él sabrá
que debemos hacer para salvar a nuestras hermanas... las Sardinas!!!

Y enfiló el vuelo desde el Fondo del Mar hacía la Roca Negra
en donde Martín seguramente le esperaría y le contó que necesitaban
ayuda pero el Consejo de Peces por no saber... nada sabía ...
Martín se acordó de los Alcatraces y estos algo le dirían.

Pero además las Águilas Pescadoras también eran sus amigas y
no se olvidaba que aún tenía entre las alas, una baza escondida...
y esa era su amiga Loro que en casa del Comandante de Marina, vivía,
y ella le haría saber como a las pobres Sardinas, acababan con sus vidas.

Cuando este, escuchó a su loro contar las terribles noticias,le ordenó
que le transmitiera a su amigo el Martín Pescador para que este
avisara al Pez Volador y al Consejo de Peces que el propio Comandante de Marina
tomaría al anochecer drásticas medidas sobre los asesinos de Sardinas.

Y ordenando a los barcos de guerra y helicópteros, patrullar de noche y de día
y al oír el Consejo de Peces que se cumplirían esas medidas, entendieron
que entre los humanos aún quedan personas buenas que respetan la evolución
de cada animal y las Leyes de supervivencia, aún siendo primitivas.

Aquella noche, todos los barcos que del puerto salían, fueron detenidos
y comprobaron que algunos, en sus bodegas, bombas tenían que no
dudarían en explotarlas tan pronto su radar le marcara bancos de Sardina y
atados de pies y ,manos para tierra y a prisión, el Comandante de Marina los llevaría.

Solo dos  intentaron escapara  pero desde los helicópteros bombas les caían
y ni uno quedó vivo como ellos hicieran con las pobres Sardinas, los otros
a la Justicia fueron llevados  y de allí, 90 años de cárcel tendrían
y así, todas las tardes el Pez Volador y su amigo Martín sobre la Roca Negra se reían.