""""""" El Burro Lucero.... el Loro .... y los Perros.."""".



""""""" El Burro Lucero.... el Loro .... y los Perros.."""".

Como todos los días, sacaba a pasear a sus cuatro perros,
previo ducharlos, peinarlos y el alimento del bueno ...
porque pronto comenzaría la caza del astuto conejo...
y debía cuidar a sus cuatro perros, que para eso gastó su dinero.

¡¡¡ Que nada le faltaran a sus cuatro joyas y si hacía falta, un médico
ni que nadie despertara a tan ilustres señoritos, si tenían sueño,
mientras el pobre burro, en una esquina del huerto, triste y enfermo,
veía como su amo de él se olvidara y de su nombre ni en el recuerdo.

Le dolía el estómago pero para él, no había un solo euro para médicos
mientras tuvo fuerza, arrastró toda la carga que le pusieron ...
nunca protestó por ello, pero ahora, lo dejaban allí todo el día abandonado
de comer... lo que diera el suelo, total solo era un viejo burro y enfermo.

Aquellos malvados perros sabían muy bien de su dolor y sufrimiento
y cuando el amo no los veía ... hasta en las orejas le mordieron ...
que el señor Pedro pensaba  que fueran las moscas quien esa llaga le hicieron,
más el pobre burro callaba y a su lado el amo,  jamás volvió ha tenerlo

Y el pobre burro, de nombre Lucero abandonado y sin compañía en el huerto,
intentaba comer las pocos hierbas que del suelo iban creciendo... ...
mientras los cuatro perros ... la carne sin hueso y hasta el queso fresco ...
su dueño, el señor Pedro, le ponía a diario para luego cazaran conejos.

Y llegaron los días de caza, y su amo se puso muy... pero muy contento
preparó el coche y en su jaula-cuna, acunó con mucho cariño a los perros
y hacía el monte se fueron, seguro esta vez de cazar no menos de 40 conejos,
que orgulloso mostraría en el pueblo con sus nuevos compañero, los perros.

El burro Lucero, allí se quedó esperando muy intranquilo a su dueño ...
aquellos perros no eran ni mucho menos ... de alma .... buenos ...,
la caza era peligrosa y había demasiadas escopetas para tan pocos conejos,
y hasta que entrara en la casa, sano y sonriendo, de allí no se movería, sin verlo.

Oscurecía la tarde y el burro sabía que no era hora de cazar .... conejos ...
pero su amo no venía y una sensación extraña, le comía por dentro...
-¿ Que hace, señor burro a estas horas en la calle que no es normal.... aquí verlo?
-¡¡¡ Hayy que preocupado estoy, señor loro, pues mi amo, de la caza,no ha vuelto

-¡¡¡ Pues sí que es extraño ... ¿ fue solo de caza ... o esta vez llevó a los perros?
-¡¡¡ No fue solo... pero como si lo fuera ...¡¡¡ ¿ de esos...?¡¡¡no me fío ni un pelo!!!
voy a ver si lo encuentro antes de que la Luna oscurezca el sendero ...
no quiero pensar si a mi amo ...algún tiro en el cuerpo le dieron ...

-¡¡¡Y yo te acompaño, señor burro, que no sabe tu amo, lo que tú eres de bueno!!!
Y por el aire, el Loro ... y por los caminos el pobre ... dolorido burro enfermo
-¿seguro que fue hacía el valle de los conejos ...o se iría al otro extremo
-No lo sé señor Loro que ni los buenos días me dice ahora porque soy viejo.

-¡¡¡ Me parece que veo un coche... con las luces encendidas y nadie dentro...!!!
y corrió a galopar el burro sin acordarse del dolor que tenía por dentro
más allá de lo que el dolor le permitía, pero ahora su amo, era lo primero
y cuando llegaron al coche ... vieron a los cuatro perros, sentados y sonriendo.

-¡¡¡ Y el amo- le preguntó el burro ...- ¿ y que hacéis ahí sin moveros ...?
 El amo se cayó por ese agujero y como no nos dice nada, permanecemos quietos
posiblemente tiene las dos patas rotas pues el pozo tiene unos 20 metros
pues lleva un rato quejándose de sufrimiento... pero ellos ... quietos.

-¡¡¡ Loro...vete  la Policía corriendo, trae una ambulancia que mi amo se esta muriendo.
Y mientras el burro, cogía una cuerda del coche y de la cual se ataba a un extremo
su amó que lo sintió, al ver la cuerda, se ató a sus dos manos, como el fuego
que el burro tiraba y tiraba pero las tripas sentía que se le iban rompiendo.

Más, no paró hasta ver la cabeza de su amo por fuera de aquel agujero
que la ambulancia en ese momento llegaba y para dentro lo metieron
-Tiene dos piernas rotas pero de esta y gracias al burro,no se   muere D. Pedro
y derechos al Hospital lo llevaron sin darse cuenta que el burro había muerto

Pero al día siguiente, cuando al amo le contaron lo que el loro iba diciendo,
preguntó - ¿ y mi burro .... llegó a casa ....le han dado de comer, está contento?
y cuando le contaron que su burro, del esfuerzo se había muerto..
su corazón sintió un pinchazo y muerto quedó después de oír aquello.

Cuentan que al Valle de los Conejos, los cazadores....jamás fueron ...
porque aveces ven pasar sonrientes al amo y a su burro riendo ...
y hay quien aseguró que ahora le avisan a los incautos conejos..
cuando un cazador se acerca ... los conejos, parece que se fueron al Cielo.

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