""" GATOLANDIA .... el pueblo de los Gatos Ladrones..."""""
Durante mucho tiempo, Gatolándia no se diferenciaba de los demás pueblos del Valle.Había sido un pueblo normal con sus casas, sus tiendas, su río, su Plaza Mayor, su escuela, su parque infantil donde cada tarde correteaban los niños, etc etc. Su buena gente dedicaba sus horas a diferentes trabajos, tanto en el campo como en el comercio y tenían un Sr. Alcalde que llevaba las cuentas y el control municipal y el viejo policía, Samuel dispuesto siempre a mantener la paz a cualquier hora del día y de la noche.
Como cada mañana,las madres despertaban a sus hijos para ayudarles en el ritual diario de vestirse, asearse y desayunar para después ir a la escuela, ... pero.... aquella mañana un misterio rodeó cada hogar. Habían desaparecido la leche, los yagurés, la mermelada, el Cola-Cao y todo el resto de la comida que iba ha servir de desayuno. ¡¡¡Bueno...!!!- dijeron las madres- se me olvidó de comprarlo-, así que presurosas fueron a la tienda o comprar "lo que les faltaba" y allí estaban las demás madres. ¡¡¡Que raro.... a todas se les había olvidado...." y sin darle mayor importancia, prepararon los desayunos y el día continuó, pero a la mañana siguiente....otra vez lo mismo....volvía ha faltar la comida del desayuno y esta vez no es que "se olvidaran..." es que " alguien les había robado en todas las casas, la comida del desayuno de los niños. Solo quedaba la comida que hubiese dentro del congelador...y esto empezó ha asustar a toda la población, pero nadie tenía una explicación. Al tercer y cuarto día.... lo mismo.... siempre faltaba la comida del desayuno de los niños, así que el sr. Alcalde, convocó una reunión en el Centro del Pueblo para buscar una explicación a aquel misterio que ya había sido escuchado por los pequeños, provocando un terrible miedo al llegar la noche y no poder dormir. Ahora solo era la comida y si mañana robaban a los niños. Todo el Pueblo vivía asustado, porque nunca vieron a nadie que no fuera del Pueblo, Permanecieron varios días haciendo vigilancia nocturna pero era inútil, nadie pasaba por las calles del Pueblo que fuese sospechoso. El viejo policía, sr. Samuel, próximo ya a retirarse no estaba dispuesto al final de su mandato, que aquello quedara sin resolver, así que ordenó que bajaran el sofá del Alcalde al centro de la Plaza y él pasaría día y noche de guardia hasta descubrir a los malvados ladrones. La gente que pasaba, se paraba a charlar con él, por lo cual, ordenó al carpintero del Pueblo que colocase un alto cartel y en letras claras decía, "Queda prohibido dirigirse a mí o hablarme de día o de noches, de lo contrario, el que lo haga lo encerraré en la celda del Pueblo. ¿ cual era el misterio que ahora reinaba en aquel anterior tranquilo Pueblo? ¿fantasmas de la noche...? ¡¡¡tonterias..!!! pero la comida seguía faltando cada mañana. Fuera lo que fuera, deberían ser 20 0 30.....¡¡¡¡¡lo que fueran...!!!!. El día anterior, llegaran al Pueblo todos los policías de los Pueblos del Valle para investigar... pero nada de nada.No saldría del centro del Pueblo el viejo Samuel, mientras no detuviese a semejantes delincuentes y podían estar seguros, que una vez detenidos, pasarían largos años en la cárcel del Condado. Su familia le llevaba comida y cena pero en silencio, porque Samuel había prohibido hablar y su enfado no era para tomarlo en broma y así fueron pasando los primeros días, hasta que en el amanecer del sexto día, unas enormes carcajadas, despertaron a todo el Pueblo que asustado alió a la calle. Allí, al lado de la silla del Alcalde, Samuel había enloquecido. Su cuerpo rodaba por el suelo y su voz era una negra carcajada¡¡¡seguro que fueron los fantasmas....!!!- decían los habitantes del Pueblo
-¡¡¡Callaros- dijo el Sr. Alcalde- y traed inmediatamente al médico ...
Samuel seguía trinchado de risa, rodando por el suelo ¿ pero porque...? Cuando llegó el médico, comprobó que el viejo Samuel, simplemente tenía un fuerte ataca de risa ¿ de risa...? exclamaron los ciudadanos ¿ de risa...? ¿ que le había dado tanta risa...?. Poco a poco se fue calmando y pudo exclamar- """ Estoy.. bien... ellos han sido los ladrones...""" y otra vez , otro ataque de risa... ¿ ellos....quienes... los fantasmas....? le preguntaron...-"" No hay fantasmas... sino ... los...""" ¿ los...que..?.? ¿ estaría loco...? ¿ los... pero que..? " Siiiiiiiiiiiiii... ellos son los ladrones de la comida del desayuno ( como se le conocía últimamente El médico ordenó que le dejaran en paz hasta que se recuperase, pero el viejo Samuel sacó fuerzas para que le trajeran una gran pizarra de la escuela en la que escribió " Ellos están aquí entre nosotros, nos oyen y entienden pero no saben leer """ y otro ataque más de risa. Debemos reunirnos a puerta cerrada en el Ayuntamiento y os lo contaré. Llevar la pizarra y que nadie hable una sola palabra porque... están aquí... entre nosotros""" si antes había sido un misterio... aquello se había convertido en verdadero miedo. Reunidos en el Ayuntamiento, cerraron todas las puertas y en voz muy baja, comenzó ha hablar el viejo Samuel "" son ....los...
GATOS.... nuestros gatos ""¿ nuestros gatos...? murmuraron todos ¡¡¡¡¡Silencio...hablar en voz baja porque ellos nos pueden escuchar.... veréis.. durante unas horas, me dí cuenta que tenía que ser alguien del Pueblo porque todas las calles dan a la Plaza Mayor, así que fuera lo que fuera, tenía que pasar por allí, y por allí no pasaba nada extraño, así que me hice el dormido y a las cuatro de la mañana vi como de cada casa, salía un gato llevando atada a su cola una bolsa de comida.....¡¡¡todos hacían lo mismo....!!!!- ¿ nuestros gatos....porque?- no lo sé dijo Samuel
-¡¡¡Noooooo!!! esta noche pescaremos gatos.....a medida que vayan saliendo, le lanzaremos el anzuelo y quedarán clavados, luego los llevaremos al árbol Centenario de la Plaza Mayor y los ataremos al mismo
-¿Los vamos a matar...?
-¡¡¡Serás animal...!!!! claro que no, los ataremos y traeremos al viejo Loro para que le pregunte porque han estado robando la comida de los niños... y ahora en silencio....volver a vuestras casas...y preparar las cañas de pescar para esta noche.
No podían creerlo...¿ los gatos...? pero si el viejo Samuel, lo decía tenía que ser verdad, así que en silencio en sus casas para que los gatos no se enteraran, dejaron preparadas las cañas de pescar esperando que llevara la hora; ¡¡¡las cuatro de la mañana...!!! y a esa hora, comenzaron a salir de cada casa los gatos, como había dicho el policía, con una bolsa que parecía de comida atada al rabo.Sin hacer ruido, los papás les lanzaron el anzuelo de cada caña y fueron uno a uno quedando enganchados a ella. Los llevaron al centro de la Plaza Mayor y los ataron juntos alrededor del Centenario árbol. Debían esperar a que el viejo Loro despertara pero a las ocho de la mañana, el sr. alcalde ordenó que lo trajeran y le preguntara a los gatos el porque habían robado " la comida del desayuno", Cuando el Loro, les transmitió el mensaje de los gatos...todos palidecieron de pena.....
"""""""""""Hemos robado la comida de vuestros hijos, porque a nosotros solo nos dais para comer restos de espinas y viejos huesos y nosotros también tenemos hijos que alimentar, pero estamos arrepentidos y os pedimos perdón.....
Nadie era capaz de hablar. Nunca se habían dado cuenta de que los gatos también son animales que tienen hijos que criar y con espinas, los pobres habían pasado mucha hambre. En silencio, los fueron soltando del árbol y sin hablar nada, cada papá y cada mamá, recogió a su gato y lo llevo de vuelta a casa para curarle las heridas del anzuelo y desde aquel día, todos los días, cuando las mamás despertaban a sus hijos para desayunar, las mamas gatas, despertaban a sus hijos gatitos para desayunar y así niños y gatitos desayunaron siempre juntos. Nunca más espinas, ahora los gatitos y sus papas podían tomar leche,cola-cao, zumo, chocolate, mermelada y volvieron ha ser un Pueblo más feliz al compartir el desayuno juntos niños, niñas, gatos y gatas todos los días.
Como cada mañana,las madres despertaban a sus hijos para ayudarles en el ritual diario de vestirse, asearse y desayunar para después ir a la escuela, ... pero.... aquella mañana un misterio rodeó cada hogar. Habían desaparecido la leche, los yagurés, la mermelada, el Cola-Cao y todo el resto de la comida que iba ha servir de desayuno. ¡¡¡Bueno...!!!- dijeron las madres- se me olvidó de comprarlo-, así que presurosas fueron a la tienda o comprar "lo que les faltaba" y allí estaban las demás madres. ¡¡¡Que raro.... a todas se les había olvidado...." y sin darle mayor importancia, prepararon los desayunos y el día continuó, pero a la mañana siguiente....otra vez lo mismo....volvía ha faltar la comida del desayuno y esta vez no es que "se olvidaran..." es que " alguien les había robado en todas las casas, la comida del desayuno de los niños. Solo quedaba la comida que hubiese dentro del congelador...y esto empezó ha asustar a toda la población, pero nadie tenía una explicación. Al tercer y cuarto día.... lo mismo.... siempre faltaba la comida del desayuno de los niños, así que el sr. Alcalde, convocó una reunión en el Centro del Pueblo para buscar una explicación a aquel misterio que ya había sido escuchado por los pequeños, provocando un terrible miedo al llegar la noche y no poder dormir. Ahora solo era la comida y si mañana robaban a los niños. Todo el Pueblo vivía asustado, porque nunca vieron a nadie que no fuera del Pueblo, Permanecieron varios días haciendo vigilancia nocturna pero era inútil, nadie pasaba por las calles del Pueblo que fuese sospechoso. El viejo policía, sr. Samuel, próximo ya a retirarse no estaba dispuesto al final de su mandato, que aquello quedara sin resolver, así que ordenó que bajaran el sofá del Alcalde al centro de la Plaza y él pasaría día y noche de guardia hasta descubrir a los malvados ladrones. La gente que pasaba, se paraba a charlar con él, por lo cual, ordenó al carpintero del Pueblo que colocase un alto cartel y en letras claras decía, "Queda prohibido dirigirse a mí o hablarme de día o de noches, de lo contrario, el que lo haga lo encerraré en la celda del Pueblo. ¿ cual era el misterio que ahora reinaba en aquel anterior tranquilo Pueblo? ¿fantasmas de la noche...? ¡¡¡tonterias..!!! pero la comida seguía faltando cada mañana. Fuera lo que fuera, deberían ser 20 0 30.....¡¡¡¡¡lo que fueran...!!!!. El día anterior, llegaran al Pueblo todos los policías de los Pueblos del Valle para investigar... pero nada de nada.No saldría del centro del Pueblo el viejo Samuel, mientras no detuviese a semejantes delincuentes y podían estar seguros, que una vez detenidos, pasarían largos años en la cárcel del Condado. Su familia le llevaba comida y cena pero en silencio, porque Samuel había prohibido hablar y su enfado no era para tomarlo en broma y así fueron pasando los primeros días, hasta que en el amanecer del sexto día, unas enormes carcajadas, despertaron a todo el Pueblo que asustado alió a la calle. Allí, al lado de la silla del Alcalde, Samuel había enloquecido. Su cuerpo rodaba por el suelo y su voz era una negra carcajada¡¡¡seguro que fueron los fantasmas....!!!- decían los habitantes del Pueblo
-¡¡¡Callaros- dijo el Sr. Alcalde- y traed inmediatamente al médico ...
Samuel seguía trinchado de risa, rodando por el suelo ¿ pero porque...? Cuando llegó el médico, comprobó que el viejo Samuel, simplemente tenía un fuerte ataca de risa ¿ de risa...? exclamaron los ciudadanos ¿ de risa...? ¿ que le había dado tanta risa...?. Poco a poco se fue calmando y pudo exclamar- """ Estoy.. bien... ellos han sido los ladrones...""" y otra vez , otro ataque de risa... ¿ ellos....quienes... los fantasmas....? le preguntaron...-"" No hay fantasmas... sino ... los...""" ¿ los...que..?.? ¿ estaría loco...? ¿ los... pero que..? " Siiiiiiiiiiiiii... ellos son los ladrones de la comida del desayuno ( como se le conocía últimamente El médico ordenó que le dejaran en paz hasta que se recuperase, pero el viejo Samuel sacó fuerzas para que le trajeran una gran pizarra de la escuela en la que escribió " Ellos están aquí entre nosotros, nos oyen y entienden pero no saben leer """ y otro ataque más de risa. Debemos reunirnos a puerta cerrada en el Ayuntamiento y os lo contaré. Llevar la pizarra y que nadie hable una sola palabra porque... están aquí... entre nosotros""" si antes había sido un misterio... aquello se había convertido en verdadero miedo. Reunidos en el Ayuntamiento, cerraron todas las puertas y en voz muy baja, comenzó ha hablar el viejo Samuel "" son ....los...
GATOS.... nuestros gatos ""¿ nuestros gatos...? murmuraron todos ¡¡¡¡¡Silencio...hablar en voz baja porque ellos nos pueden escuchar.... veréis.. durante unas horas, me dí cuenta que tenía que ser alguien del Pueblo porque todas las calles dan a la Plaza Mayor, así que fuera lo que fuera, tenía que pasar por allí, y por allí no pasaba nada extraño, así que me hice el dormido y a las cuatro de la mañana vi como de cada casa, salía un gato llevando atada a su cola una bolsa de comida.....¡¡¡todos hacían lo mismo....!!!!- ¿ nuestros gatos....porque?- no lo sé dijo Samuel
-¡¡¡Noooooo!!! esta noche pescaremos gatos.....a medida que vayan saliendo, le lanzaremos el anzuelo y quedarán clavados, luego los llevaremos al árbol Centenario de la Plaza Mayor y los ataremos al mismo
-¿Los vamos a matar...?
-¡¡¡Serás animal...!!!! claro que no, los ataremos y traeremos al viejo Loro para que le pregunte porque han estado robando la comida de los niños... y ahora en silencio....volver a vuestras casas...y preparar las cañas de pescar para esta noche.
No podían creerlo...¿ los gatos...? pero si el viejo Samuel, lo decía tenía que ser verdad, así que en silencio en sus casas para que los gatos no se enteraran, dejaron preparadas las cañas de pescar esperando que llevara la hora; ¡¡¡las cuatro de la mañana...!!! y a esa hora, comenzaron a salir de cada casa los gatos, como había dicho el policía, con una bolsa que parecía de comida atada al rabo.Sin hacer ruido, los papás les lanzaron el anzuelo de cada caña y fueron uno a uno quedando enganchados a ella. Los llevaron al centro de la Plaza Mayor y los ataron juntos alrededor del Centenario árbol. Debían esperar a que el viejo Loro despertara pero a las ocho de la mañana, el sr. alcalde ordenó que lo trajeran y le preguntara a los gatos el porque habían robado " la comida del desayuno", Cuando el Loro, les transmitió el mensaje de los gatos...todos palidecieron de pena.....
"""""""""""Hemos robado la comida de vuestros hijos, porque a nosotros solo nos dais para comer restos de espinas y viejos huesos y nosotros también tenemos hijos que alimentar, pero estamos arrepentidos y os pedimos perdón.....
Nadie era capaz de hablar. Nunca se habían dado cuenta de que los gatos también son animales que tienen hijos que criar y con espinas, los pobres habían pasado mucha hambre. En silencio, los fueron soltando del árbol y sin hablar nada, cada papá y cada mamá, recogió a su gato y lo llevo de vuelta a casa para curarle las heridas del anzuelo y desde aquel día, todos los días, cuando las mamás despertaban a sus hijos para desayunar, las mamas gatas, despertaban a sus hijos gatitos para desayunar y así niños y gatitos desayunaron siempre juntos. Nunca más espinas, ahora los gatitos y sus papas podían tomar leche,cola-cao, zumo, chocolate, mermelada y volvieron ha ser un Pueblo más feliz al compartir el desayuno juntos niños, niñas, gatos y gatas todos los días.
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